¿Qué es la proteína botulínica?
En Dermatología estética la usamos principalmente para tratar las arrugas de expresión de la cara. Es una técnica de rejuvenecimiento facial muy efectiva y segura. Apreciada por muchos pacientes de edades intermedias conocedores de las técnicas de rejuvenecimiento.
La proteína botulínica neutraliza las arrugas de expresión durante unos 6 meses, porque produce la relajación de los músculos gesticuladores de la cara . Tras este período es reabsorbida y finaliza su efecto. La aplicación repetida aumenta su duración, pudiendo llegar a durar 10 o 12 meses.
Bloquea la captación del neurotransmisor acetilcolina en la placa motora, responsable de la transmisión del impulso nervioso estimulante del músculo, resultando en su relajación y de esta forma destensando la piel que lo recubre. Esto hace que las arrugas disminuyan o desaparezcan.
Tratamiento estético con proteína botulínica en Satander
El tratamiento consiste en la infiltración subcutánea directa de la proteína botulínica mezclada con suero, en los músculos responsables de la formación de las arrugas. Los más importantes son: 1. Músculos corrugadores y piramidal que forman las arrugas del entrecejo (se forman con el gesto de enfado), 2. Músculo frontal que forma las arrugas de la frente (al levantar las cejas), y 3. Músculo orbicular de los ojos que forma las patas de gallo (al sonreír).
Usamos agujas muy finas para causar las mínimas molestias. El efecto empieza a notarse unos tres días más tarde, siendo completo al cabo de unas 2 semanas.
El tratamiento es rápido y sencillo, no necesitamos inyectar anestesia y lo realizamos en la sala de tratamientos de nuestra clínica. Usted puede reincorporarse de inmediato a su vida normal.
Está contraindicado durante el embarazo, la lactancia y en zonas próximas a inflamación o infección. Tampoco deben emplearse en paciente con miastenia gravis, tratamientos que provoquen alteraciones de la actividad muscular y con algunos antibióticos.
Afinar el contorno facial
Existe una nueva técnica destinada a modelar el rostro en la zona mandibular, que muchas veces da un aspecto “cuadrado” a la cara. Con esta técnica se puede afinar el óvalo facial que muchas veces se ve aumentado por el desarrollo excesivo de los músculos maseteros (músculos masticadores), resultando en una disarmonía facial.
Este tratamiento además mejora el bruxismo (rechinar de dientes), pues relaja la musculatura implicada en apretar los dientes, por lo tanto ayuda a proteger las piezas dentarias de la excesiva fuerza muscular y a eliminar los dolores asociados, por ejemplo dolores de cabeza.
La técnica consiste en inyectar toxina botulínica en estos músculos para relajarlos y evitar que ejerzan mucha fuerza. Ésto también ayuda a que disminuya el excesivo volumen que se produce en el contorno del óvalo facial. Así el rostro queda con una apariencia más armónica y fina.
Realizamos el procedimiento en una sesión, después hacemos un control a los 15 días. El efecto de adelgazamiento del rostro se ve a partir de los 2 meses aproximadamente. Para mantener los resultados continuados es necesario la repetición del tratamiento cada 6 meses.
También se puede utilizar en otras localizaciones como el cuello, para reducir las crestas verticales que marca el platisma, las líneas de la amargura que tiran de las esquinas de la boca hacia abajo (las levanta), código de barras…
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